Cortitos Encadenados (Eslabones R+S). Parte 3.
¡Si no te gusta bucear, será difícil que unos buenos muslos calienten tus orejas!
¡Si no te gusta el pescado, comes carne, y si eres vegetariano, ese ya es tu problema!
Si no tienes el tacto necesario para acariciar con suavidad unos turgentes pechos, tampoco tendrás la delicadeza imprescindible para pedirle a su dueña que te permita tocarlos.
Si no tuviera hambre, probablemente estaría muerto, ya que solamente los cadáveres tienen sus necesidades cubiertas al cien por cien, aunque también es cierto, que se puede estar muerto y seguir todavía respirando, eso sí, con cierta dificultad.
Si realmente piensas que has venido a este mundo solo a obedecer, y hacer todo lo que te digan los demás que hagas, es mejor que cambies de planeta.
Si sabes que me voy a enfadar con lo que vas a contar, mejor que no me lo cuentes, si al final, no puedes aguantar y lo sueltas, ¡no me digas luego que no me enfade!
Si siempre te empeñas en buscar lo que no está a tu alcance, lo más probable es que nunca lo encuentres.
Si solo te acuerdas de Santa Bárbara cuando truena, quizás sea ya un poco tarde para evitar la mojadura.
Si te asusta la soledad, debes de buscar la compañía adecuada para mitigarla, y si no la encuentras, prueba a convivir solo contigo mismo, quizás le cojas el gusto.
Si te asusta la soledad, procura estar acompañado, pero luego no te quejes, si la compañía elegida te mete miedo o es insoportable.
Si tienes la suerte de que tu pareja tenga la inteligencia necesaria para utilizar con frecuencia el sentido del humor, eso no te va a garantizar que la convivencia con la persona elegida te haga ser feliz, pero seguro que te hará reír con frecuencia, algo que en estos tiempos de tragedia permanente, es muy de agradecer.
Si tienes tu primera cita con una chica (o chico) y realmente piensas que ella (o él) ha quedado contigo por hacerte un favor, por compasión o por caridad, lo mejor es que te busques una buena excusa y no acudas, aunque, piensa que quizás puedes estar equivocado, desperdiciando una gran oportunidad para encontrar a tu media naranja.
Si tu buena educación te obliga a ser falso cuando estás presente, lo mejor para no ser un mal educado, es estar ausente.
Si tus relaciones con las mujeres no funcionan, igual la culpa es tuya, puede que tu forma de ser, no sea la más apropiada para establecer contactos serios con la persona elegida como pareja, así que tú verás si debes de cambiar o no, aunque si lo haces porque alguien te lo dice, pero tú no estás muy convencido de ello, quizás, lo que acabes consiguiendo, es que tu “feeling” con ellas sea aún peor.
Si tus relaciones con las mujeres no funcionan nunca, y no te “comes ni un rosco”, ¡pues, menuda putada, amigo!
Si una persona se esfuerza cada día de su vida en lograr ser más libre y trabaja duro para conseguir ser más sabio, seguro, que no está perdiendo el tiempo.
Si una persona tiene el atrevimiento suficiente para afrontar un reto difícil, nunca puede dejar que el miedo le impida disfrutar de lo que ha conseguido, ya que el valor del riesgo siempre ha de servirle de coraza protectora contra cualquier temor inmediato.
Si uno, en verdad piensa que es inteligente, no tiene motivos para avergonzarse, siempre que la valoración sea real. La inteligencia no es un pecado, muy al contrario, si se sabe utilizar correctamente, es una auténtica bendición. Lo que si resulta peligroso, es creerse excesivamente inteligente, sobre todo cuando uno es más bien tonto, en este caso, el riesgo de hacer el ridículo es muy alto.
Si vives una vida que no es la tuya, es que has dejado que el impostor que llevas en tu interior, se haya apoderado de ti. Él y no tú, es quien toma las decisiones. Tú tan solo eres una pobre marioneta en sus manos.
Si vivir, tan solo sirve para envejecer, no resulta un negocio rentable, por eso es conveniente medir la existencia por los años aprovechados y no por el tiempo vivido.
Siempre es de agradecer que uno evite mientras pueda, trasmitir su tristeza a los demás para que no sufran, y muchas veces, inútilmente.
Siempre es mejor comer sardina fresca que marisco congelado.
Siempre es mejor intentar olvidar tu pasado si no te gusta recordar lo que sucedió, pero lo que es imposible lograr, es cambiarlo. Por eso, si mirar hacia atrás te produce dolor, lo mejor que puedes hacer es no girar el cuello.
Siempre es mejor disfrutar tres días de lluvia sin paraguas, que uno de sol con sombrero.
Siempre es preferible lamentarse mil veces seguidas de un fracaso, y olvidarlo, que hacerlo solo una vez al día durante el resto de la vida.
Siempre es más aconsejable tener un enemigo valiente que un amigo cobarde.
Siempre es más práctico utilizar una mentira piadosa, que decir una verdad obsoleta, que es aquella que solo sirve para que la serpiente, que ya lleva mucho tiempo enterrada, pueda todavía envenenar a alguien.
Siempre es más acertado lamentar el error cometido por una decisión (atrevida) equivocada, que arrepentirse de no haberlo hecho por el miedo paralizante que impide tomarla.
Siempre fue consciente, de que muchos lo veían como un tío raro, pero a él, eso le importaba un bledo, seguía a lo suyo, viviendo su vida en un voluntario aislamiento, pero seguro y tranquilo en su mundo, imaginando el color de los sueños. Concentrado en sus pensamientos, en la buena compañía de la soledad elegida, disfrutando de la calma del silencio, ajeno y a salvo de los ruidos, de los que nunca escuchan, pero siempre hablan.
Siempre hay que atreverse a luchar en todo momento por lograr los objetivos que uno se propone, pero sin dejarse arrastrar muchas veces por las fantasías imposibles que una momentánea (o permanente) inestabilidad de nuestra mente, nos aconseja.